España tiene un consumo de alcohol «per capita» mayor que el de la media europea, aunque la ingesta haya disminuido ligeramente en el último lustro, según un estudio de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La agencia sanitaria de Naciones Unidas basa sus conclusiones en datos de 2016, los últimos disponibles, y en ese año el consumo «per capita» de alcohol de los españoles mayores de 15 años se situó en 10,0 litros, mientras que en 2010 era de 10,5 litros.
La media en la región europea de la OMS -que comprende no solo la UE sino toda Europa oriental, incluida Rusia y las antiguas repúblicas soviéticas- fue de 9,8 litros «per capita» en 2016, una caída considerable respecto a los 11,2 litros en 2010.
Otros países de la UE tienen índices mayores, como Francia (12,6 litros «per capita»), Irlanda (13,0) Alemania (13,4) y Lituania (15,0). También hay países europeos occidentales con consumos relativamente menores, como Suecia (9,2 litros), Islandia (9,1), Croacia (8,9), Holanda (8,7) e Italia y Noruega (ambas, 7,5 litros).
Con respecto al género, los hombres españoles consumen cuatro veces más que las mujeres, 16,4 litros y 4,0 litros «per capita», respectivamente, en 2016. Ambos sexos bebían más en 2010: 16,9 litros los hombres y 4,4 litros las mujeres. Con respecto al tipo de alcohol consumido, la gran mayoría de los españoles consumen cerveza -54 %-, mientras que el 18 % consume vino y el 28 % alcohol fuerte.
El informe de la OMS incluye un apartado sobre ebriedad, que denomina «prevalencia de episodios de alto consumo» y que define como una ingesta de al menos 60 gramos o más de alcohol puro al menos en una ocasión en los últimos 30 días.
Según este recuento, el 25,6 % de la población española de más de 15 años tuvo un episodio de ebriedad, que asciende hasta el 28,0 % si se toma la franja de edad de entre 15 y 19 años, y hasta el 49,5 % si se pregunta solo a los bebedores de entre 15 y 19 años.
En este sentido, el informe destaca que 3.621 personas murieron en 2016 por cirrosis relacionadas con la ingesta de alcohol, 590 perecieron por accidentes de tráfico donde el alcohol fue un factor y 7.264 fallecieron de cáncer y el consumo del alcohol tuvo incidencia en la dolencia.
Asimismo, se calcula que un 1,2 % de los hombres mayores de 15 años tienen una dependencia del alcohol y un 2,7 % algún desorden relacionado con el consumo; cifras que en el caso de las mujeres descienden hasta el 0,2 % y el 0,5 % respectivamente.
Ambos sexos confundidos, el 0,7 % de los españoles tienen una dependencia del alcohol, y el 1,5 % algún desorden, mientras que la media europea se sitúa en el 3,7 % y el 8,8 %, respectivamente.
Con respecto a las políticas e intervenciones de prevención, el informe subraya que España no aplica al vino el impuesto especial sobre el alcohol con el que sí se gravan otros productos, como la cerveza y los alcoholes fuertes.
Asimismo, el informe especifica que España tampoco tiene una regulación obligatoria sobre publicidad relacionada con el alcohol, ni sobre lugares ni sobre la necesidad de advertir de su nocividad.
«Está clarísimo que la regulación es necesaria, que la publicidad es clave, y que el aumento del precio a través de los impuestos es la acción más efectiva para reducir el consumo», afirmó en una teleconferencia el coordinador de la unidad de abuso de substancias de la OMS, Vladimir Poznyak, consultado al respecto.
El experto abogó por que se sigan aplicando medidas que busquen la reducción del consumo y la dependencia del alcohol, más allá de las tradiciones y la cultura».